Guadalajara.- Oswaldo Sánchez, portero
de la selección mexicana de fútbol, viajó hoy
a Alemania y aseguró que estará listo para jugar
contra Irán el domingo, en el primer juego de su país
en la Copa Mundial.
Sánchez llegó ayer a Guadalajara, oeste de México,
para participar en los funerales de su padre Felipe Sánchez,
quien murió de un paro cardiaco el miércoles, reseñó
Efe.
Minutos antes de abordar un vuelo privado junto con su esposa,
madre y hermanos, agradeció la solidaridad de su familia
y aficionados, así como la de quienes proporcionaron
el avión que le permitirá regresar a Alemania sin
escalas, ''Tengo que apoyar a mis compañeros, no le puedo
fallar a la gente que cree en mí, no le puedo fallar
a mi padre; él era quien más quería verme jugar'',
dijo.
El jugador reiteró su disposición de aparecer el
domingo con su equipo, pero reconoció que no será
decisión de él si juega.
''Es decisión del técnico Ricardo Lavolpe; me voy
con la idea de jugar, de llegar y estar bien, yo soy el primero
en saber que estoy bien para jugar o no, pero voy con esa
ilusión y quiero jugar y voy con todo''.
Según el portero, está dolido por la pérdida
de un ser querido, pero la vida sigue, y va a Alemania con
la entereza y la ilusión de jugar''. El portero titular
de la selección mexicana llegará mañana a Neuremberg,
de acuerdo al plan de vuelo, alrededor de las 21:30, hora
de Alemania, después de un vuelo de unas 14 horas, directo
desde Guadalajara.