CARACAS, domingo 21 de mayo, 2006 | Actualizado hace
Argentina y Brasil son las dos selecciones latinoamericanas con más jugadores en las ligas europeas. Su fútbol vibra en las canchas del Viejo Continente
(Foto Efe)
CRISTINA HOSSNE
EL UNIVERSAL.COM
El fútbol nació en Europa pero la historia de los
mundiales comenzó a escribirse en Suramérica en
el año 1930, cuando Uruguay albergó la primera edición
del evento futbolístico más importante del planeta.
En esa oportunidad, la selección charrúa se coronó
campeona, luego de vencer en la final a su vecina Argentina,
y la primera Copa quedó en tierras meridionales del continente
americano, para multiplicarse en años posteriores y convertir
a la región en la que más trofeos ha conquistado
en este certamen.
Desde entonces, se han disputado 17 Copas del Mundo y Suramérica
ha levantado nueve, en las manos de Brasil (5), Argentina
(2) y Uruguay (2) que figuran en el cuadro de honor de los
países que han logrado ponerse la medalla de campeones,
junto a Alemania (3), Italia (3), Francia (1) e Inglaterra
(1).
Jerarquía carioca y orgullo albiceleste
La potencia del fútbol suramericano ha sido una constante
en 76 años de competencia mundial, pero en Corea-Japón
2002 su superioridad alcanzó niveles históricos,
cuando Brasil se convirtió en pentacampeón y anotó
los goles que el Nuevo Mundo necesitaba para superar a Europa
en cantidad de Copas.
Este año, nuevamente, la selección brasileña
parte como una de las grandes favoritas para conquistar el
título en Alemania. El país de la samba es el único
que ha participado en las 17 ediciones del torneo y ostenta
el mejor registro
histórico.
El conjunto argentino es el otro exponente suramericano de
peso en la cita mundialista. Llegará a Alemania para
reivindicar su honor, tras haber sido eliminado en la primera
fase de Corea-Japón 2002, a pesar de que se perfilaba
como uno de los principales candidatos a ganar el campeonato.
Argentina es el cuarto país que registra más participaciones
en la historia de los mundiales, con 13, después de Alemania
e Italia que han estado en quince oportunidades cada una.
Otros con medida mundialista
Paraguay y Ecuador también lucharán por la
victoria en los estadios germanos. Durante las eliminatorias
dejaron por fuera a Uruguay, Colombia, Chile, Venezuela, Perú
y Bolivia.
Paraguay jugará su séptimo torneo y Ecuador se
medirá por segunda vez consecutiva con los grades del
balompié. De todas las naciones de América del Sur,
Venezuela es la única sin experiencia mundialista, aunque
por primera vez sumó 18 puntos en la fase de clasificación
para Alemania 2006, que le permitieron soñar hasta el
último momento.
La presencia de Chile no ha sido constante en la justa, pero
suma siete concurrencias, que la colocan después de Uruguay
que tiene 10. Desde las eliminatorias de 2002, la crisis del
fútbol charrúa afectó a la selección,
pero no le impidió integrarse a los 32 clasificados.
Sin embargo, se quedó en la primera fase.
La inestabilidad continuó y este año se cuenta
entre los ausentes. Fue superada de forma dramática por
Australia en partidos de repechaje que le daban la última
oportunidad de jugar en tierras germanas.
Colombia, Perú y Bolivia aún son jóvenes en
la aventura mundialista. No obstante, han dejado huellas.
Ya tienen el sello del magno evento, sólo les resta luchar
por revalidarlos y mantenerse en las siguientes ediciones.
Los otros dos conjuntos latinoamericanos que participarán
en Alemania 2006, son México y Costa Rica. La presencia
de la selección azteca en 12 mundiales la convierten
en un clásico. Luego de debutar en 1990, Costa Rica se
reencontró con la suprema competencia del deporte rey
en el 2002 y este año irá por lo goles en su tercera
contienda.
Magos del balón
El prolífico palmarés de Suramérica en el
fútbol mundial representa lo tangible, la prueba de que
esta disciplina deportiva ha adquirido propiedades particulares
en este lado del planeta que la hacen colosal y fecunda, pero
son sus estrellas quienes interesan y divierten. Son sus héroes
quienes están en boca de grandes y pequeños, por
la magia, la alegría y el ritmo de su juego.
Ronaldo de Assis Moreira, ''Ronaldinho Gaucho'', nacido y
formado en suelo brasileño, es en la actualidad el ejemplo
vivo de la fantasía, la gracia y la osadía del fútbol
que exporta Suramérica a diferentes lugares de la tierra.
Un juego con sus propias reglas que, inteligentemente, se
escurre en los escenarios más conservadores, llenándolos
de color y arte. Es la combinación perfecta entre la
emoción y la disciplina táctica; el baile y la fuerza;
la creatividad y los esquemas preestablecidos.
Esta forma de vivir el balompié es legendaria. Los antecedentes
registran la gloria de personajes que crecieron jugando a
convertirse en magos del balón y más adelante inscribieron
sus nombres entre los más grandes de cada época.
En siete de las 17 Copas disputadas, las figuras han salido
de las nóminas suramericanas. El uruguayo Héctor
Scarone, "El Gran Héctor", abrió el palmarés
en 1930. Le siguieron el argentino Juan Alberto Schaffino
en el 50, y el brasileño Pelé, quien debutó
en el 58.
Cuatro años después, su compatriota Garrincha
fue el más destacado, para dar paso nuevamente a Pelé
en México 1970. En el 86 se hizo presente la genialidad
de Diego Armando Maradona, y en el 90 fue el carioca Romario
quien brilló en el torneo.
Auriverdes en la mira
Las estadísticas favorables para los brasileños
parecen no agotarse. Pelé y Ronaldo están empatados
en el tercer lugar como los máximos artilleros en la
historia del torneo, con doce tantos, por debajo del alemán
Gerd Müller (14) y el francés Just Fontaine (13).
Este año, con tan sólo marcar tres goles, Ronaldo
pasaría a encabezar este renglón, para orgullo del
propio Müller, quien lo considera "el mejor", a pesar
de las críticas que se le hacen.
En Alemania 2006, los ojos también estarán puestos
en Ronaldinho, quien luego de su debut en Japón-Corea
2002 cuando tenía 22 años, reunió méritos
para recibir dos títulos de mejor futbolista del año
de la FIFA (2004 y 2005) y el Balón de Oro 2005, como
mejor jugador del balompié europeo.
Algo más que estrellas
Suramérica ha sido sede del Mundial en cuatro oportunidades.
Brasil, Chile y Argentina emularon la hospitalidad que tuvo
Uruguay en 1930 y abrieron las puertas de sus estadios a jugadores
de diferentes latitudes, en 1950, 1962 y 1978, respectivamente.
Estados Unidos y México son las otras naciones del Nuevo
Continente que han albergado la fiesta del fútbol. Hasta
Francia 98, América y Europa fueron anfitriones indiscutibles,
pero en el año 2002 Asia se estrenó como organizador
del torneo y en el 2010 el turno será de Suráfrica.