Munich.- El coro de alabanzas a la goleada
alemana de 4-2 ante Costa Rica en la apertura del Mundial
fue grande, pero no fueron pocos los que alzaron sus voces
críticas por el juego presentado por el equipo de Juergen
Klisnmann.
El más duro de todos fue el máximo goleador histórico
de la selección alemana, Gerd "el bombardero" Mueller:
"Fue un partido espantoso. El resultado está bien, pero
lo que hemos visto hoy en la cancha es sumamente preocupante.
La cosa no pinta bien de cara al futuro del torneo" sentenció
Mueller, el campeón mundial de 1974 que en el pasado
se había caracterizado por asumir una posición moderada
en sus juicios sobre el equipo.
Esta vez incluso fue más lejos: "No hubo ningún
jugador extraordinario. Y menos mal que lo tenemos a (Miroslav)
Klose, sin él, todo se presentaría muy sombrío",
dijo según DPA.
El Kaiser Franz Beckenbauer tampoco escondió la crítica:
"los dos goles en contra molestan. Y además, el partido
no fue muy atractivo".
Incluso Boris Becker, el ex tenista y gran amigo de la selección,
advirtió que "lo más importante fue haber ganado,
pero en la defensa hubo demasiadas lagunas, ahí tenemos
que mejorar mucho".
Lothar Matthaeus, otro de los viejos campeones mundiales
esta vez de 1990, tampoco tuvo piedad a la hora de calificar
el nivel de la defensa: "Contra un rival un poco más
fuerte el castigo hubiese sido duro".