Dortmund.- El mexicaano Benito Archundia,
que oficia la semifinal del Mundial de fútbol 2006 entre
Italia y Alemania, batió el récord de partidos dirigidos
en un Mundial, llegando a la cifra de cinco, algo que ningún
colegiado había alcanzado antes.
Seis árbitros compartían el récord anterior
de cuatro partidos en un Mundial, tres de ellos durante el
de Estados Unidos 1994.
Desde el actual formato de 32 equipos y 64 partidos, que
se estrenó en Francia 1998, nadie había superado
esa marca de cuatro duelos, a pesar de que al haber un mayor
número de encuentros, es más fácil batirlo.
El belga Jan Langenus fue el primero en dirigir cuatro partidos
en Uruguay 1930, que se disputó con 13 equipos y se jugaron
18 partidos.
Después vinieron el ruso Nickolaj Latychev (1962), el
brasileño José Ramiz Wright (1990), el húngaro
Sandor Puhl (1994), el francés Joel Quiniou (1994) y
el colombiano José Joaquín Torres (1994).
Quiniou tiene el récord de mayor número de partidos
arbitrados, con ocho encuentros entre 1986 y 1994, detalló
AFP.
Archundia comenzó su andadura en este Mundial el 13
de junio con el partido de la primera jornada entre Brasil
y Croacia del Grupo F, que los sudamericanos ganaron por 1-0.
En ese encuentro, mostró tarjetas amarillas al brasileño
Emerson y a los croatas Niko Kovac, Robert Kovac e Igor Tudor.
Su segundo partido, también de la primera fase, llegó
el 18 de junio, dirigió a Francia y Corea del Sur, en
la llave G, un duelo que terminó en empate (1-1).
El mexicano mostró tarjetas amarillas a los franceses
Eric Abidal y Zinedine Zidane y a los asiáticos Lee Ho
y Kim Dong Jin.
El colegiado azteca siguió su periplo en el Mundial
el 22 de junio con el partido del Grupo E de la primera fase
entre Italia y la República Checa (2-0). En aquel choque
mostró tres tarjetas amarillas, dos al checo Jan Polak,
expulsado al final del primer tiempo, y una a Gennaro Gattuso.
Por último, fue el árbitro del encuentro de octavos
de final entre Suiza y Ucrania, que terminó con empate
(0-0), y en el que Andrei Shevchenko y sus compañeros
se clasificaron en la tanda de penales (3-0).
En ese encuentro, el mexicano mostró sólo una tarjeta
amarilla, al suizo Tranquilo Barnetta.
Antes de este partido de semifinales entre Alemania e Italia,
Archundia mostró un total de doce tarjetas amarillas
en los cuatro partidos, con una media de tres por encuentro,
que en un caso desembocó en roja.