Berlín.- Tras una sequía que le atormentó la vida en la pasada campaña con el Inter, Adriano espera reencontrarse con el gol en su primera Copa Mundial.

"Claro que me gustaría hacer mi primer gol. Espero ese momento", respondió el "Emperador" a una reciente pregunta de la AP durante los entrenamientos de la selección brasileña. "Quiero sacarle provecho a esta oportunidad".

Adriano se prepara sin mucha bulla y se le nota con un ímpetu desbordante. El espigado artillero de 24 años es parte del "cuarteto mágico" ofensivo que completan Ronaldo, Ronaldinho y Kaká.

"Con ellos ya he venido jugando en los últimos años, pero es la primera vez que me junto con ellos en una copa, y esto representa un momento especial", confesó.

Adriano viene de una temporada de sinsabores con el Inter, en la que terminó con la pólvora mojada y disgustado con su ex compañero argentino Juan Sebastián Verón. "Voy a seguir en el Inter, pero en este momento no estoy pensando en Italia sino en el mundial", dijo.

El técnico Carlos Alberto Parreira espera que Adriano saque a relucir su zurda explosiva y le siga dando su valioso aporte a la selección.

"Cuando la gente lo necesita, Adriano saca la cara y decide", dijo recientemente Parreira.

El "Emperador" ayudó a Brasil a ganar la Copa de las Confederaciones disputada en Alemania el año pasado, al marcar dos goles en el choque de semifinales. Fue goleador del torneo y ganó el botín de oro al mejor jugador.

En la final de la Copa América del 2004 en Perú, Adriano marcó en tiempo de reposición del complemento el gol con que Brasil le empató agónicamente 2-2 a Argentina, que a la larga permitió que la escuadra verdeamarilla se consagrara campeona en los tiros de penales.

Adriano tiene una tremenda responsabilidad, pero da la impresión en los entrenamientos que la gran presión y las expectativas están puestas más en el infalible Ronaldo y el genial Ronaldinho.

Pero a diferencia de Ronaldo, del que hay dudas sobre su condición física, Adriano se nota fuerte y con mucha movilidad, informó AP.

"Sus remates queman las manos", bromeó el arquero suplente Rogerio Ceni.

Adriano comenzó su carrera con el Flamengo en 1999 y luego pasó en el 2001 al Inter, que lo cedió a préstamo al Fiorentina en el 2002. Ese mismo año pasó al Parma, donde jugó hasta el 2004, año en que el Inter lo trajo de vuelta.

La afición del Inter lo bautizó como el "Emperador", aunque en la pasada temporada comenzó a recriminarlo por su escasez ofensiva.

Debutó el 15 de noviembre del 2000 en la selección, con la que lleva 32 partidos internacionales y 23 goles marcados. Fue campeón en el mundial Sub17 de Nueva Zelanda.