Teherán.- La selección de Irán
de fútbol se impuso en Teherán hoy por 5-2 a la
de Bosnia Herzegovina en el último partido amistoso que
disputará el combinado persa antes del inicio del Mundial
de Alemania.
Antes de que comenzara el partido un grupo de mujeres iraníes
se concentraron a las puertas del estadio para exigir que
se las dejase entrar en el campo, algo prohibido por la estricta
legislación islámica de Irán.
Las mujeres colocaron en el obligatorio velo islámico
unas pegatinas en las que se leía ''la mitad del estadio
es nuestro derecho'', en referencia a su deseo de poder ocupar
la mitad de los asientos del campo.
El combinado iraní logró remontar el tanto inicial
de los bosnios, para lograr una importante inyección
de moral de cara a la Copa del Mundo, donde debutará,
ante México, el 11 de junio.
Pese a que unos 35.000 espectadores acudieron al estadio
Azadi de la capital, los jugadores bosnios consiguieron dominar
los primeros minutos del encuentro, informó Efe.
El control del juego del equipo azul se materializó
en dos tantos, el primero obra de Misimovic, logrado cuando
sólo habían transcurrido cuatro minutos de juego,
y el segundo de Barbarez un cuarto de hora después.
Sin embargo, la selección iraní se repuso al desconcierto
inicial y consiguió remontar el marcador antes de que
el árbitro, el malasio Saleh Subkhiddin, pitase el fin
del primer tiempo.
Los goles de Mehrzad Madanchi (minuto 25), Rahman Rezai (minuto
44) y Vahid Hashemian (minuto 45) hicieron que no se notasen
las importantes ausencias del equipo iraní, que no contó
con sus estrellas Mehdi Mahdavi Kia, Freydun Zandi y Ali Karimi.
Finalmente, el dominio persa se materializó en dos goles
al filo del final del encuentro, logrados por Reza Enayati
(minuto 88) y Rasul Jatibi (minuto 90), que llenaron de esperanza
las gradas del estadio de Teherán.