Accra.- La euforia en torno al desempeño de Ghana en el Mundial de Alemania 2006 aún sigue. Todavía se abren botellas de champagne, los colores nacionales rojo-amarillo-verde aún tiñen todo el país y se entonan los cánticos patrióticos, reseñó DPA. Una nación que estuvo profundamente dividida desde el punto de vista político ha logrado unirse en torno a Stephen Appiah, Michael Essien, John Mensah, Suley Muntari, Haminu Dramani, Sammy Kuffour y sus compañeros. El vicepresidente Aliu Mahama y los principales líderes de la oposición estuvieron juntos en un escenario para dar la bienvenida a la selección de Ghana a su regreso al país. Antes de su llegada, los dos lados del Parlamento lograron un consenso _una rara oportunidad_ en honor de los "Black Stars". Mahama dijo a los jugadores a su llegada que su desempeño había dado un impulso a la autoconfianza nacional. Y al parecer las celebraciones seguirán por algún tiempo más. Ahora hay una creciente toma de conciencia de la necesidad de canalizar esos avances positivos en algo permanente. De allí que Mahama recomendó a la Asociación de Fútbol de Ghana (GFA) que trabaje duro para asegurar que los "Black Stars" conquisten la Copa de Africa, que ellos organizarán en 2008. Y la GFA busca encontrar rápidamente fórmulas para capitalizar la buena racha del equipo ghanés, que superó a varios adversarios poderosos antes de ser eliminado de Alemania 2006 en octavos de final por los brasileños cinco veces campeones mundiales. Los "Black Stars", que ocupan el puesto 48 en el ranking de la FIFA, se convirtieron en el único equipo africano en clasificarse a la segunda fase del Mundial de Alemania. "Nuestra tarea inmediata es fortalecer el equipo", dijo Kwasi Nyantakyi, presidente de la GFA.