Río de Janeiro.- El entrenador Carlos Alberto Parreira y un grupo de los jugadores de la selección brasileña eliminada de la Copa Mundial regresaron ayer en medio de abucheos de un puñados de hinchas. Parreira desembarcó en Río de Janeiro con integrantes del equipo técnico y salió sin ser visto por los periodistas ni por el pequeño grupo de personas que los aguardaba. "Burro", "Mercenario", "Cobarde", gritaron algunas personas al enterarse que el técnico se marchó del aeropuerto por un lugar no revelado. "Traidores", se escuchó en el aeropuerto de Sao Paulo adonde arribaron, entre otros, Roberto Carlos, Mineiro, Rogerio Ceni, Ricardinho, Cris, Fred, Cicinho y Luisao. El futuro de Parreira será resuelto una vez que regrese a Brasil el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ricardo Teixeira, quien se quedó en Alemania, dijo el dirigente Ricardo Faria. El resto de la selección brasileña, entre ellos los astros Ronaldinho, Ronaldo y Kaká, regresaron el domingo mismo desde Fráncfort a las ciudades europeas en las que residen. Cafú, el veterano capitán y uno de los más criticados, habló brevemente con periodistas en Sao Paulo y dijo que el fracaso de Brasil debe ser tomado con calma, reseñó AFP. "Crearon un fantasma de que Brasil debería llegar a la final. Ahora Brasil perdió y es normal que el equipo sea criticado", dijo Cafú, titular en los cuatro últimos mundiales, dos de ellos ganados por Brasil (1994 y 2002) y uno en el que resultó subcampeón (1998). "Mi currículum en el fútbol es de vencedor, con más victorias que derrotas. Pensaré más en las victorias que en las derrotas. Ahora hay que pensar en las próximas copas y en jugar al fútbol", puso de manifiesto Cafú, de 36 años. Brasil "fue un equipo que no consiguió superar al adversario. Fue superado por Francia y por eso no tuvimos fuerza para dar vuelta el partido", dijo el jugador al explicar la derrota por 1-0 ante Francia en cuartos de final. En Río de Janeiro, Gilberto, lateral suplente de la selección que hizo un gol contra Japón en el único partido que jugó, fue aplaudido por personas que lo vieron en el aeropuerto internacional. "Hubiera preferido no haber hecho el gol y volver como campeón", afirmó el jugador y restó importancia a las críticas que arrecian contra la selección que era dada como favorita para llevarse la Copa de Alemania.