Uno de los momentos decisivos en la rutilante carrera
de Michel Platini, antiguo capitán de la selección
de Francia, fue en Marsella, donde el 23 de agosto de 1984 pareció,
incluso, detener el tiempo por un momento. Faltaban muy pocos
segundos para el final del tiempo suplementario en una de las
semifinales de la Eurocopa contra Portugal. El partido estaba
2-2 y la definición por penales parecía inevitable.
Fue entonces cuando Platini marcó uno de los mejores goles
de su carrera, regateando en el área de Portugal, hipnotizando
a los defensores y dar el triunfo a Francia. Al final, los "bleus"
fueron campeones.
JPortugal fue otra vez el rival en una semifinal cuando Francia
logró su segundo campeonato de Europa en 2000. Todo terminó
con un gol de penalti de Zinedine Zidane en tiempo suplementario
antes de ganar 2-1 en Bruselas. Figo y Zidane se reencuentran
de nuevo, pero esta vez en la Copa del Mundo.