Hamburgo.- Ucrania dejó su huella en la Copa del Mundo por llegar hasta los cuartos de final en su debut. Pero pocos la recordarán por su estilo de juego. Y eso no molesta al técnico Oleh Blokhin, reseñó AP. "Esto es fútbol, no el ballet Bolshoi", comentó. Aunque Blokhin se quejaba con esa frase de lo que consideró un arbitraje muy estricto, el comentario también resume adecuadamente su planteamiento táctico en la cancha. La selección llegó a los cuartos de final en su primer Mundial con un fútbol poco atractivo pero efectivo. Sin embargo, el estilo soviético llamado "colectivismo", que prima el juego en conjunto sobre las individualidades, llevó al equipo lo más lejos que pudo hasta que se topó con un plantel italiano mucho más pulido y creativo que le encajó un 3-0 el viernes. "Hubiese sido difícil empatar, y ni hablemos de ganar. Enfrentamos a un muy buen equipo italiano que merecía ganar", dijo el delantero Andriy Shevchenko, nuevo ariete del Chelsea e indiscutible astro del plantel. "Ucrania no tiene mucha destreza, pero tiene corazón. Tratamos de atacar y anotar durante los 90 minutos, pero no se pudo. Nosotros también estamos contentos con nuestro Mundial porque llegamos hasta aquí", señaló. Cuando el equipo llegó al torneo hizo oídos sordos a los comentarios de que se trataba de un plantel de Shevchenko y 22 desconocidos. Pero al final resultó ser cierto, y la falta de experiencia internacional del resto fue evidente. El próximo objetivo de Ucrania será clasificarse para la Eurocopa 2008.