CARACAS, viernes 30 de junio, 2006 | Actualizado hace
Berlín.- El manager de la selección
alemana, Oliver Bierhoff, estuvo en el centro de la trifulca
que se desató en pleno terreno de juego al final del
partido en el que Alemania eliminó por penaltis a Argentina
en cuartos de final.
Varios jugadores argentinos reaccionaron con indignación
y rodearon a Bierhoff, ex jugador internacional, que a su
vez fue protegido por miembros de la delegación alemana.
Durante más de un minuto hubo empujones y golpes por
ambos bandos. El árbitro, el eslovaco Lubos Michel, y
oficiales de la FIFA se vieron envueltos en la caótica
refriega, que se disolvió segundos después ante
la mirada de 72.000 espectadores que abarrotaban el estadio
Olímpico.