Marienfeld.- Luiz Felipe Scolari tiene una fama de exigente en materia de disciplina que le ha ganado el apodo de "Sargento Instructor", y en más de tres años y 46 partidos como seleccionador de Portugal, nunca le habían expulsado a un jugador. Eso se acabó el domingo, cuando Costinha y Deco recibieron tarjeta roja en el accidentado partido con Holanda por los octavos de final del Mundial, que Portugal ganó 1-0. Scolari lamentó que los incidentes y las expulsiones nuevamente le den a los portugueses la fama de "cabezas calientes", reseñó AP. En el Mundial de 2002, Joao Pinto golpeó a un árbitro que lo expulsó, y fue suspendido de toda competencia internacional por tres meses. "Portugal es conocido por lo que pasó en 2002 y se le saca en cara. No es un equipo violento, pero a veces da la imagen de ser indisciplinado". Dio a entender que culpa al árbitro ruso Valentín Ivanov por los incidentes del domingo. Ivanov mostró 16 tarjetas amarillas y cuatro rojas. "Tenemos que preguntar si nosotros jugamos sucio, o si lo que ocurrió se debió a decisiones del árbitro", dijo. Se mostró especialmente molesto por la expulsión de Deco, sancionado por demorar el partido. Pero los partidos anteriores muestran que Portugal tiene un juego fuerte. Las estadísticas de la FIFA dicen que el equipo es el cuarto que más faltas ha cometido en el Mundial, con 78, detrás de México, Holanda y Ecuador.