Berlín.- Tarde o temprano el momento llegará, pero es posible que ese momento sea hoy: tras 31 años, 11 meses y 20 días, el récord del alemán Gerd Müller puede caer en el Westfalenstadion de Dortmund. Müller, uno de los emblemas del fútbol alemán en los setenta, marcó 14 goles en dos mundiales: diez en México 70 y cuatro en Alemania 74. Ronaldo, gracias a sus dos anotaciones ante Japón, ya suma 14 a lo largo de tres mundiales, y hoy jugará con Brasil ante Ghana por los octavos de final de Alemania 2006. El alemán no se inmuta, porque asegura haber estado convencido siempre de que su récord caería en algún momento. "El verdadero récord lo tiene Just Fontaine, con 13 goles en un solo Mundial. Algo que no logré nunca", dice Müller elogiando al francés, máximo anotador en Suecia 58. Müller, de 60 años, reparte sus días entre el tenis _su gran pasión hoy_, su puesto de coentrenador de los aficionados del Bayern Múnich y múltiples compromisos de relaciones públicas, entre ellos el de "embajador" de la sede mundialista de Múnich. De aquel 7 de julio de 1974, cuando marcó en el estadio olímpico de Múnich el 2-1 decisivo ante Holanda en la final del Mundial, le queda el buen recuerdo y la certeza de que en su época las cosas eran más complejas, reseñó DPA. "Hoy es mucho más sencillo para los delanteros, que se enfrentan a una línea de cuatro. Nosotros nos enfrentábamos a un líbero y un stopper. Probablemente hoy yo anotaría más goles que entonces". Anotó bastantes, de todos modos: 365 en 427 partidos, entre ellos 68 en 62 cotejos con la camiseta alemana. Superó además una adicción, el alcoholismo, hace ya años. Ahora tiene la vista puesta en el Mundial, y no ve con optimismo el choque entre Argentina y Alemania el viernes: "Contra esos perdemos. No sería una vergüenza, porque creo que serán los campeones mundiales".