Dortmund.- Al menos en teoría, Dortmund vivirá el equivalente futbolístico del bíblico duelo de David contra Goliath: el Brasil "pentacampeón" se medirá por los octavos de final de Alemania 2006 con Ghana, un debutante en Mundiales que se convirtió en la gran sorpresa del torneo. Pero el técnico brasileño Carlos Alberto Parreira sostiene que en la práctica el partido será mucho menos fácil de lo que se podría imaginar, precisamente por el largo historial de éxitos de su equipo, que carga sobre sus hombros toda la responsabilidad de la victoria frente a un seleccionado que no tiene nada que probar ni que perder. "Ghana es un francotirador", argumentó Parreira, quien, en una muestra concreta de su preocupación, puso a sus pupilos a entrenar tiros penales, por si el pase a cuartos pudiera decidirse desde los once pasos. Además, el entrenador rodeó de misterio la alineación del equipo: "Este es el momento de hacer algo de misterio. Todos los entrenadores anuncian el equipo en el vestuario y el mundo no se acaba por ello", alegó Parreira, quien se negó hasta a anunciar los criterios que utilizará para formar el once titular. Más enigmático imposible, pero en realidad quedan pocas dudas, pues se da por descartado que el "cuarteto mágico" de ataque también deberá volver a su formación original, con Kaká y Ronaldinho abasteciendo el dúo de delanteros formado por Ronaldo y Adriano, ya que el joven astro Robinho se lesionó el sábado y no podrá actuar. Rival duro Así como Parreira, la mayoría de los jugadores de Brasil adoptaron el discurso tradicional de elogiar al adversario. 'En el Mundial no hay rival chico. No va a ser un partido fácil", aseguró el astro Ronaldo, quien podrá convertirse en el máximo artillero de la historia de los Mundiales si logra marcar un gol ante Ghana y con ello superar la marca del alemán Gerd Müller. El equipo ghanés, que logró su pasaporte a octavos con victorias sobre República Checa y Estados Unidos tras dar duro combate en la derrota ante Italia en el debut, confía sin embargo en que podrá dar mañana quizás la más grande sorpresa de la historia de los Mundiales. "¡Claro que le podemos ganar a Brasil! Ellos son un gran equipo y tienen a varios de los mejores futbolistas del mundo, como Ronaldinho, Ronaldo o Kaká. Pero en el fútbol siempre hay sorpresas", afirmó el astro ghanés Stephen Appiah, apuntado por Parreira como el "cerebro" del equipo, cuya principal baja será el centrocampista Michael Essien. El técnico de la selección de Ghana, el serbio Ratomir Dujkovic, quien es auxiliado por el venezolano Alí Cañas como asistente técnico, también confía en la victoria, siempre y cuando resulte su estrategia de "bloquear a todo el equipo brasileño", y no sólo individualmente a sus principales estrellas, lo que, a su juicio, es un esfuerzo inútil. Cafú para el recuerdo Cuando ingrese hoy a la cancha del Westfalenstadion el veterano capitán de la selección brasileña, Cafú, sumará una marca más a su cada vez más larga colección de récords. Ante Ghana, Cafú estará disputando su decimonoveno partido mundialista, y superará la marca de 18 encuentros del ex arquero Taffarel y del ex volante Dunga. Si Brasil avanza a cuartos de final, Cafú se convertirá en el jugador con más victorias mundialistas, superando a los alemanes Wolfgang Overath y Lothar Matthaeus. Cafú es el único jugador del planeta en haber disputado tres finales mundialistas _las de Estados Unidos 1994, Francia 1998 y Corea/Japón 2002 en la cual fue campeón.