CARACAS, sábado 24 de junio, 2006 | Actualizado hace
Munich.- El entrenador de Alemania, Juergen
Klinsmann, advirtió hoy que todavía queda mucho
para llegar a la final del Mundial de fútbol, pero que
su equipo se está divirtiendo jugando.
"Todavía nos queda mucho trabajo por delante, pero nos
estamos divirtiendo", dijo el técnico en entrevista con
la televisión alemana, tras derrotar por 2-0 a Suecia
en los octavos de final del Mundial, según reseñó
DPA.
"La final todavía está lejos", añadió.
"Pero estamos en forma. Podemos mantener un alto ritmo de
partido".
Sobre su adversario de cuartos de final, que se dirimirá
en el partido que celebran esta noche Argentina y México,
Klinsmann dijo no temer a los favoritos de Argentina, en caso
de que se adjudiquen el cotejo en Leipzig.
"Que vengan los argentinos, que no les tenemos miedo", desafió
a los sudamericanos, rebosante de confianza. "Estamos en condiciones
de llegar a semifinales y a la final".
Más allá del aspecto deportivo, Klinsmann destacó
la importancia del estado anímico del plantel como clave
del éxito: "Lo más importante es la fe, los jugadores
creen en lo que hacen y por eso llega el éxito", explicó
el seleccionador, quien se había fijado como meta mínima
llegar a semifinales.