Dortmund.- Suiza derrotó ayer a Togo 2-0 en su primer triunfo mundialista en doce años y dio un paso gigantesco en el sueño de avanzar a octavos de final en el Mundial de Fútbol de Alemania 2006, al tiempo que complicó la situación del campeón mundial Francia y benefició a Corea del Sur. El equipo dirigido por Koebi Kuhn se impuso en el estadio de Dortmund con goles de Alexander Frei, a los 16 minutos y Tranquillo Barnetta, a los 88, y desplazó a Corea del Sur en la punta del Grupo G. Ahora les basta un empate con Corea el viernes en Hannover para meterse en octavos de finales. Togo, un equipo que ocupó los titulares con las idas y venidas por el pago de premios y la renuncia temporal del entrenador Otto Pfister, fracasó ahora a nivel deportivo y quedó eliminado del torneo. El conjunto suizo controló la pelota en los primeros minutos y se puso en ventaja pronto con el gol del delantero Frei tras una gran jugada ofensiva del equipo: centro desde la izquierda, el mediocampista Tranquillo Barnetta bajó la pelota al medio del área y Frei la envió al fondo de la red ante el inútil intento del portero africano Kossi Agassa. Togo no bajó los brazos, y comenzó a dominar gracias a un buen control de la pelota de sus mediocampistas, pero no encontró la profundidad necesaria para inquietar al portero suizo Pascal Zuberbuehler. Aun así, en el minuto 29 gozó de una excelente oportunidad para empatar, pero el atacante Thomas Dossevi remató desviado. Zuberbuehler contuvo luego un disparo de media distancia a Cherif Toure Mamam. En el minuto 35, Patrick Mueller hizo caer a Adebayor en el área chica, pero el árbitro paraguayo Carlos Amarilla no concedió el claro penal. Para la segunda parte, Suiza salió decidida a estirar las cifras, generando ocasiones ofensivas, reseñó DPA. Togo, visiblemente inferior a su adversario, careció de claridad en los pases para aproximarse a la portería suiza. Por ello su único recurso ofensivo pasó a ser el remate de media distancia. El delantero Emmanuel Adebayor fue la gran amenaza para la defensa suiza, pero también estuvo impreciso en la definición. En los últimos minutos los togoleses llenaron el área suiza de centros, no obstante nadie pudo anotar el gol del milagro. Pero aun a los 88 Suiza hizo una jugada perfecta, tomando a contrapié a toda la defensa togolesa para anotar el 2-0 a través de Barnetta. Suiza sumó así su segundo partido mundialista sin recibir goles, y podría clasificarse a octavos incluso con un empate en su último encuentro ante Corea del Sur si Francia no derrota a Togo.