Stuttgart.- Costa de Marfil, que busca recuperarse de la derrota ante Argentina, y Holanda, "que jugará para ganar" según su director técnico, Marco van Basten, son protagonistas de un duelo que promete un fútbol ofensivo, hoy en Stuttgart por el Grupo C del Mundial. Cualquiera que sea el resultado, los amantes del buen balompié quedarán satisfechos si las intenciones anunciadas se concretan en la cancha. "Jugaremos por los tres puntos, porque una victoria será casi sinónimo de clasificación para octavos de final", anunció el defensa holandés Giovanni van Bronckhorst, quien tuvo un desempeño brillante en la victoria de su equipo (1-0) ante Serbia y Montenegro. "No tengo ganas de vernos obligados a ganarle a Argentina para asegurar la clasificación. Sería demasiado arriesgado", advierte el jugador. Por su parte, el delantero marfileño Bonaventure Kalou, que conoce muy bien el fútbol holandés por haber jugado dos temporadas en el Feyenoord, señaló: "no estamos para nada abatidos por la derrota (ante Argentina), no tenemos complejos, tenemos disposición para vencer a Holanda". Será la ocasión de disfrutar de un duelo a distancia entre los delanteros Arjen Robben y Didier Drogba, reseñó AFP. El primero fue decisivo en el triunfo de la "Naranja" ante Serbia-Montenegro, y seguramente querrá demostrar que está en muy buena forma y que su desempeño no fue casual. También sus compañeros en el tridente ofensivo, Ruud van Nistelrooy y Robin van Persie, opacados en el primer encuentro, intentarán demostrar que integran una fórmula letal. "¡Es cierto!, jugué mal el domingo en Leipzig. Pero hice mi autocrítica y brindaré mi respuesta ante Costa de Marfil", prometió Van Nistelrooy. Drogba, por su parte, ambiciona "superar la frustración" del debut frente a Argentina. "Ahora sabemos que tenemos el nivel como para luchar con los mejores y lo vamos a demostrar frente a los holandeses", advierte el delantero. Bajo presión tras la derrota del sábado, el entrenador marfileño, el francés Henri Michel, modificaría la integración de su línea delantera, ubicando a Aruna Didane junto a Drogba, en detrimento de Kader Keita. Los africanos tienen prohibido perder, aunque un empate tampoco los condenaría a hacer las valijas de manera tempranera en su primera cita mundialista. No obstante, perciben las cosas de otra manera, por lo que Kalou fue algo dramático al afirmar, "estamos entre la espada y la pared".