Rafael Dudamel

Ecuador ejemplar

Me quedo muy contento con la clasificación de Ecuador. Su triunfo me trae muy buenos recuerdos, porque fue contra ellos que regresé a la selección, en aquel tremendo partido que les ganamos 3-1 por las eliminatorias al Mundial en Pueblo Nuevo. Fue un partido que nos llevamos con holgura, tranquilidad y buen fútbol. Los veo celebrando en Alemania y todavía no consigo las respuestas para saber por qué la vinotinto está ausente. Quizás es que Ecuador tuvo en la eliminatoria lo que tanto nos faltó: ser intocables en casa. ¿Por qué, entonces, no les sacamos provecho a las altas temperaturas de Maracaibo? No más de seguir acomodándonos a los horarios de la televisión. Debemos sentirnos contentos de que el presidente de la FVF, el señor Rafael Esquivel, ocupe altos cargos en la Conmebol y en la FIFA, pero nos gustaría disfrutar de esa influencia. Como lo hacen las demás selecciones. Me alegra por Ecuador, pero más por su técnico Luis Fernando Suárez, a quien tuve como DT por una temporada en el Deportivo Cali, allá por 1991. Muchos pensaron que la tendría difícil, que la sombra de Hernán Daríó Gómez, de quien tomó las riendas, sería demasiado. Asumió sin miedo, con atrevimiento, y ahora cobra los frutos. Ecuador fue a Alemania con ambición, convencido y unido tras un objetivo. Lograron una clasificación contundente, cómoda, que consiguieron basados en el fútbol, la táctica y la estrategia, los argumentos que se necesitan para vencer en un Mundial.