CARACAS, viernes 16 de junio, 2006 | Actualizado hace
_¿Qué significa para usted el próximo
partido contra Italia?
_Estoy orgulloso de mi ascendencia italiana, he seguido a
la selección italiana desde mi niñez. Desde niño,
a los seis años, miraba mucho un póster del equipo
azurro de 1950 en la pared de una panadería que tenía
mi abuelo, Salvatore Schembre, en Brooklyn.
_¿Sigue imaginando esa foto?
_Se me aparece ahora para atormentarme. Venir de ancestros
italianos es divertido.
_¿Algún otro vínculo con Italia?
_Ningún otro, con excepción de la pasta
y un limitado vocabulario italiano. Nací en Estados
Unidos. Tengo antepasados en ese país europeo.
Apenas estuve allí solamente en tres ocasiones
en mi vida. Mi madre es siciliana y mi padre de Nápoles.
Estoy seguro que tengo sangre allí. Pero no la
seguí. Todos miran la categoría de Brasil
en el torneo, pero a mí todavía me gusta
Italia y lo seguí por muchos años.