RAFAEL DUDAMEL

En deuda

Inglaterra se presentaba con la gran expectativa de mostrar a todas sus figuras juntas. Ya no era el Machester Unided o el Chelsea solamente y esperábamos deleitarnos con su fútbol.

En el minuto 3, a centro de Beckham y con roce de Gamarra, se produjo el primer gol, que a la postre fue la diferencia, para quedarse con los tres puntos, pero no con la tranquilidad de hacerse del partido y desplegar todo su fútbol a lo largo y ancho de la cancha. Las circunstancias adversas seguían para Paraguay luego de la lesión de Justo Villar. Los contratiempos le jugaron una mala partida a la selección paraguaya en su primer compromiso ante una Inglaterra que se mostraba ambiciosa, aunque sin suerte. Entre los pocos vistosos y conectados en el partido siempre estuvo David Beckahm. El jugador del Real Madrid dejó de un lado la farándula y entendió que era hora de deleitar al público representando a su país con un buen fútbol. Poco a poco, Paraguay se fue afianzando, Inglaterra comenzó a sentir temor y se dedicó a conservar la ventaja de 1-0. Paraguay intentó a ratos jugar, pero sin mucha claridad. Apenas pequeños sustos lograban generar en un arco que siempre fue bien custodiado no sólo por el meta Robinson, sino también por el central Terry y toda la zaga inglesa. Pero la dupla Owen-Crouch no resultó como se preveía. A Inglaterra sólo le importaba ganar y no jugar lindo. Era muy importante comenzar con tres puntos y así lo consiguió. Sigue siendo candidato por cada uno de sus nombres, pero en lo colectivo todavía tiene muchos detalles que mejorar.