Berlín.- El presidente de Costa Rica, Oscar Arias, cree que su selección no superará la primera ronda del Mundial y tampoco le aventura mucho éxito en el partido contra Alemania, en el que un empate le haría "el hombre más feliz del mundo", reseñó Efe. Aun así, Arias dijo sentirse "muy emocionado con la posibilidad de poder venir como presidente de mi país a estimular a nuestra selección nacional en el partido inaugural". "Hace dieciséis años estuve en Italia y tuve la oportunidad de acompañar a la selección, pero había dejado la Presidencia un mes antes, por lo que acudí al partido como ciudadano. Y creo que les llevé mucha suerte porque hicimos un papel muy decoroso", recordó. "En esta ocasión yo quisiera que nuestra selección, como hace dieciséis años, hiciera un papel decoroso". Arias estableció un paralelismo entre deporte y política: "Uno debe participar y competir porque así es el juego en los sistemas democráticos". "Uno participa y compite a sabiendas de que no tiene ninguna posibilidad de triunfo. Pienso que es lo que nos pasa a nosotros con la participación de Costa Rica en esta Copa Mundial". Y reiteró: "Vamos a participar, pero pienso que no hay ningún costarricense que crea que tengamos alguna posibilidad de pasar a la siguiente ronda". Arias, que viaja hoy a Múnich, sede del encuentro, tras entrevistarse en Berlín con la canciller alemana, Angela Merkel, está seguro, pese a ese pesimismo generalizado, de que el partido contra Alemania congregará frente al televisor a sus conciudadanos. "Intuimos que ese partido, a las diez de la mañana hora local costarricense, provocaría absentismo laboral, así es que decidimos dar de asueto la mañana. De todas formas, nadie hubiera llegado a sus oficinas", agregó.