Aquejado de una ampolla en el pie izquierdo, Ronaldo abandonó la cancha después del primer tiempo. El delantero, cuyo tanto marcado a los 43 minutos de juego abrió camino a la victoria brasileña por goleada de 4-0 en Ginebra, dejó el encuentro dos veces durante el primer tiempo para cambiar el botín y ponerse un curativo sobre el talón lastimado. Tras la pausa, mientras seguía el resto del partido desde el banquillo de suplentes, trató de deshacer los temores de que estuviera lesionado. "Es un problema que debe solucionarse en las próximas horas", dijo.